En
noviembre de 1782, mientras descansaban en la sala de su casa, los
hermanos franceses Josseph-Michel y Jacques-Étienne Montgolfier
descubrieron que el fuego de la chimenea era capaz de elevar una
bolsa de papel, y así fue como se les ocurrió hacer los
primeros globos.
Los
hermanos Montgolfier realizaron la primera demostración pública de
su nuevo invento el 4 de junio de 1783 en Francia. Su sueño
de llegar hasta el cielo se hizo realidad.
Fuente: Internet
Muy observadores esos hermanos. El inconveniente que le veo a los globos es que están a merced del viento y, por tanto, sabes de donde sales, pero siempre tienes que ir a donde te dirija el viento. Por otra parte, si el viento es suave, el espectáculo está asegurado. No he subido nunca en uno, pero tiene que ser alucinante.
ResponderEliminarMuy curioso el mps, pero no me gustaría estar en el lugar del que está agarrado a la cuerda.
un abrazo
Debe ser una experiencia inolvidable, además de arriesgada. El espectáculo que ofrecen cuando vuelan varios juntos, es un preciosidad. Además de intrépida, la criatura que está agarrada a la cuerda, parece que hace acrobacia.
EliminarUn abrazo.
Lucía
Es curiosísimo que muchas de las cosas que se han inventado parezcan producto del azar.
ResponderEliminarYo esta histora creo que la desconocía.
Muy bonito el marcapáginas.
Un abrazo.
Mª Luisa
También desconocía la historia. La he conocido a través de internet, cuando estaba preparando la entrada y parece ser que no fue producto del azar.
EliminarGracias por el comentario.
Un abrazo.
Lucía.