Se
encuentran alineados sobre el cerro Calderico. Datan del siglo XVI.
De los trece originales, se conservan doce, que son: Bolero, donde se
encuentra la oficina de turismo y se conserva el moledero de trigo;
Mambrino; Sancho, que conserva la maquinaria del siglo XVI y se usa
en la Fiesta del Azafrán; Mochilas, recientemente restaurado por la
escuela taller del pueblo, Vista Alegre; Cardeño, donde se aloja una
casa ya deshabitada; Alcancía; Chispas; Caballero del Verde Gabán,
que cuenta con numerosas versiones de El Quijote; Rucio, que cuenta
con una exposición de vinos; Clavileño, con fotografías y mobiliario de
Andorra.
Espartero, que contiene una exposición de artesanía toledana y donde compré este marcapáginas.
y este broche en labor de ganchillo, que representa a la rosa del azafrán.
El
noventa por ciento del cultivo del azafrán se realiza en Castilla-La
Mancha, con fama de ser de los mejores del mundo. En torno a él gira
esta fiesta, pues su recolección a mano, día por día, a medida que
se abren sus flores, así como su secado, han creado una cultura
gastronómica, histórica y tradicional propia y exclusiva de esta
tierra.
El
Festival Nacional de Folclore, en el que participan grupos de música
y danzas folclóricas de toda España, es de gran interés. Además se realizan diversos actos, como la molienda tradicional de trigo
en el molino de viento llamado Sancho, el concurso de monda de
azafrán, que premia la rapidez en la extracción de las hebras de la
especia de las flores, o el certamen gastronómico.
Vista de Consuegra
y su campo.
En el mencionado Cerro Calderico se alza el Castillo de la Muela, donde hubo un asentamiento celtíbero, probablemente
carpetano. Hay historiadores, que sostienen que fue el emperador
Trajano quien construyó la fortaleza, aunque la primera
documentación existente, sitúa el inicio de su construcción
durante el Califato de Córdoba en el Siglo X.
Los marcapáginas, muy bonitos, pero las fotografías, impresionantes y con tu manera de exponerlas y explicar, nos das una lección de historia, de arte, de ...todo, incluídas las ganas de visitar Consuegra.
ResponderEliminarYo creo que no había visto tan bien los molinos nunca y por supuesto que no sabía ni sus nombres ni a lo que dedican cada uno.
¡ Qué bonita la rosa del azafrán! No quiero pensar en el trabajo de recogerla...
¡ Preciosa entrada!
Un abrazo.
Luisa
Es una alegría comprobar, que la entrada invita a visitar, esa hermosa e histórica tierra castellana. Me gustaría asistir a la Fiesta del Azafrán y comprobar cómo realizan el trabajo de recolección.
EliminarGracias por el comentario.
Un abrazo.
Lucía.
No sabía lo de los nombres de los molinos; muy curioso y un bien merecido homenaje al Quijote. Muy bonitos lpos mps y el campo de azafrán, una maravilla de mucho valor.
ResponderEliminarUn abrazo
¡Cómo aumentamos nuestros conocimientos, con las entradas que realizamos!. Es magnífico.
EliminarCuando se conoce la forma de recolección del azafrán, se entiende su valor.
Gracias por el comentario.
Un abrazo.
Lucía.
Me encanta viajar contigo y disfrutar a través de tus ojos y tu cámara viendo los molinos (con esos nombres tan cervantinos), los campos de azafrán, los pueblos de La Mancha, ese Quijote de metal...en fin, que tus entradas no son solamente para disfrutar de los marcapáginas (muy bonitos, por cierto).
ResponderEliminarUn abrazo.
Justa
Este lugar se puede disfrutar, más de lo que nos podemos imaginar; y además me alegra saber, que tengo una grata compañera de viaje virtual.
EliminarMuchas gracias por tu comentario.
Un abrazo.
Lucía.