El Centro Cerámica Triana (CCT) es la materialización de un proyecto municipal ideado con el fin de preservar la memoria de una de las últimas fábricas de cerámica que han estado activas en la ciudad de Sevilla hasta hace muy poco tiempo.
Marcapáginas magnético
La antigua fábrica Cerámica Santa Ana ha sido objeto de un cuidadoso proceso de rehabilitación, que ha conservado numerosos elementos tradicionales de la fábrica y ha dado forma a nuevos espacios donde se desarrollan diferentes actividades: visitas a las viejas instalaciones, a la colección permanente de cerámica, a exposiciones temporales, etc., además de unos talleres artesanales para reactivar la tradición alfarera trianera.
El Centro
Cerámica Triana queda distribuido en dos plantas de la siguiente
manera:
En la
planta baja pueden encontrarse varios hornos históricos (algunos del
siglo XVI), el pozo de agua, los depósitos de arcilla, las molinas
de minerales, las almágenas o recipientes para guardar los pigmentos
preparados, el torno de alfarero, las tablas de oreo de piezas y
secado de moldes o el tablero donde los pintores decoraban los
grandes paneles de azulejos.
Mufla.
Es un horno pequeño, con una cámara de cocción aislada de los gases y los humos de la combustión, en el que se cocían delicadas piezas artísticas que precisaban de condiciones y temperaturas especiales.
Hornos:
En todo alfar solía haber hornos para "bizcochar"piezas crudas, hornos para cocer piezas decoradas y muelas. Los dos primeros tenían la misma forma y, aunque se les llamaba "morunos", su estructura esencial estaba ya definida desde el mundo antiguo. Construidos a principios del siglo XX, estos hornos eran denominados con los nombres de famosos toreros de la época de Gallito y Belmonte.
Solera de molino: Durante las excavaciones del solar apareció esta enorme piedra que era la parte baja y fija de un viejo molino en el que eran molturados los componentes del esmalte. Para ello, otra piedra giratoria rodaba sobre esta, impulsada por tracción animal.
Alcafita: Es el nombre de origen islámico que recibía en Triana la parte más baja del horno desde la cual se introducía la leña en la cámara de combustión. Estaba excavada en la piedra, dejada sin cubrir y rústicamente pavimentada.
Solera de molino:
Durante las excavaciones del solar apareció esta enorme piedra que era la parte baja y fija de un viejo molino en el que eran moldurados los componentes del esmalte. Para ello, otra piedra giratoria rodaba sobre ésta, impulsada por tracción animal.
Arriba a la derecha: Molinas de esmalte. En cada una de estas molinas era triturado el mineral que servía para elaborar los diferentes pigmentos cerámicos con que se pintaban las obras.
Cada una molía un color.
Conjunto de paneles y azulejos publicitarios.
Cerámica Santa Ana. (1940-1960)
147 x 360 cm.
Diferentes técnicas.
Colección Municipal. Ayuntamiento Sevilla.
Marcapáginas magnético
En la
planta alta se combinan varios espacios con diferentes funciones:
punto turístico, salón de actos, centros de información sobre el
Barrio de Triana, sala de exposiciones temporales y salas de la
exposición permanente. Esta última formada por piezas municipales
que estaban depositadas en algunos museos de la ciudad, completada
con obras solicitadas en préstamo a otros propietarios.
Tina
Hacia 1750.
60 x 74 x 6 cm.
Pintado.
Museo Arqueológico de Sevilla.
Tarjetero.
Manuel Arellano, 1892.
53cm.
Pintado.
Colección Carranza.
Busto de Carlos Pickman, fundador de la empresa Cerámica de la Cartuja. (Antonio Susillo. 1885)
Tarjetero. Pickman y Cia, (hacia 1880).
Tibor. Hacia 1890.
Sopera y cazo. Pickman y Cía. (hacia 1890)
Bacía de barbero. Pickman y Cía. Siglo XIX. Estampación en negro.
Panel de azulejos. La Rendición de Granada.
Antonio Kiernam. Cerámica Santa Ana, después de 1940.
Pintado.
Colección Municipal.
Ayuntamiento de Sevilla.
Marcapáginas magnético
Panel de azulejos.
Hacia 1880
Estampación iluminada sobre barniz
Primera mitad del siglo XVI.
A la izquierda: Cariátide
Cerámica Santa Ana. (1940-1960)
228x60 cm.
Pintados
Colección Municipal.
Ayuntamiento de Sevilla
A la derecha:
Cuadro de azulejos.
Cerámica Santa Ana. (1940-1960)
40x40 cm.
Pintados.
Colección Municipal.
Ayuntamiento de Sevilla.
Panel de azulejos ornamentales
Cerámica Santa Ana, (1940-1960)
164 x 185 cm.
Pintados
Colección Municipal.
Ayuntamiento de Sevilla.
Manuel Arellano y Campos, (hacia 1903)
200x180cm.
Pintado.
Colección Municipal.
Ayuntamiento de Sevilla.
Me encanta la cerámica, tanto en su faceta de dar forma al barro, como en la de pintar azulejos. Paseando por Sevilla se pueden admirar la infinidad de obras de este tipo, tanto en edificios públicos, como en casa particulares que decoran sus zaguanes y patios con maravillosos zócalos con azulejos de este tipo.
ResponderEliminarLos mps preciosos y las fotos, a cual mejor. Lógicamente me quedo con el panel de azulejos en el que aparecen reperesentados flores y pájaros; para mirarlo y requetemirarlo una y otra vez.
Un abrazo
La alfarería es, un trabajo admirable, que al pasear por Sevilla se le da más aprecio, al descubrir las decoraciones que comentas. Como ya he conocido el contenido del Centro, quiero pasar un día sólo para recrearme en el panel de las flores y los pájaros.
EliminarMuchas gracias por tu comentario.
Un abrazo.
Lucía.
A mí también me gustan mucho esos marcapáginas con azulejos. Son realmente espléndidos.
ResponderEliminarUn abrazo
Me alegro que te hayan gustado. De los marcapáginas magnéticos, están editando bastantes modelos.
EliminarGracias por tu comentario.
Un abrazo.
Lucía.
¡Qué ebonitos marcapáginas y qué interesante lugar!...¡y esa tina y ese tarjetero!...
ResponderEliminarUn abrazo.
Este centro expositivo bien merece una visita, al igual que el barrio donde está situado, que es Triana, con tradición alfarera. Tanto la tina, como el tarjetero pertenecen a la colección donada a Sevilla por el ceramófilo Vicente Carranza. En el Alcázar hay una exposición permanente de 171 piezas, distribuidas en tres salas en el Cuarto del Almirante. Son fantásticas.
EliminarGracias por tu comentario.
Un abrazo.
Lucía.
Lo primero que me llamó la atención de la ciudad...Con lo que me gustan los azulejos y la cerámica...¡ Imagínate aterrizar en la Plaza de España y luego los patios y...por todas partes.
ResponderEliminarMaravillosa exposición y regalo para la vista, como siempre.
Un abrazo
Luisa
Si te gustan los azulejos, me imagino lo que sería, encontrarte con la recién elegida "Tesoro de la Cultura Cinematografía Europea". Y, paseando por las calles del centro, ver los zócalos en los zaguanes de algunas casas. He procurado poner en la entrada, las piezas que me han parecido más interesantes. Me alegro que hayan sido de tu agrado.
EliminarGracias por tu comentario.
Un abrazo.
Lucía.