Anverso
Patio de las Doncellas
Patio de las Doncellas
Se
trata de un patio rectangular de 21x15 metros circundado por cuatro
galerías; dos de siete y dos de cinco arcos. En el centro hay una
alberca con grandes arriates hundidos un metro a ambos lados. Los
laterales de estos arriates están decorados con arcos de medio punto
entrelazados. Los arcos lobulados están decorados con sebka y
relieves en yeso. Entre 1580 y 1584 todo esto fue enterrado y se
colocó una solería de mármol, para la que se trajeron artesanos de
Macael, Espera y Acán. Los arriates y la alberca fueron descubiertos
en unos estudios arqueológicos en 2002.
En torno a la planta baja había algunas estancias que eran accesibles para los invitados, mientras que en la planta superior solamente había habitaciones privadas. La planta superior de este patio fue reformada entre 1540 y 1572. De esta época son los arcos de medio punto apoyados en columnas de mármol con capiteles jónicos elaboradas en Génova por Antonio María Aprile da Carona y Bernardino da Bissone. Las columnas de la planta baja fueron sustituidas entre 1560 y 1569 por otras labradas en la misma ciudad italiana por Francisco y Juan Lugano y Francisco da Carona.
Reverso
Salón de Embajadores
Esquina del Salón de Embajadores
Arco de los Pavones.
Se trata de una puerta (más bien una comunicación, pues no tiene hojas que lo cierren) monumental, compuesta por tres arcos de herradura, soportados por dos columnas centrales de mármol jaspeado y dos pilastras laterales, cubiertas de azulejos y yeserías, contenidos por un alfiz sobre el que aparecen tres celosías cegadas y todo el conjunto enmarcado en otro alfiz ligeramente apuntado.
Entre el alfiz de los arcos de herradura y las celosías, hay una cenefa en la que están representadas numerosas aves empleadas en cetrería, a las que el rey Don Pedro, era tan aficionado. En las esquinas aparecen dos pavos reales, que son los que dan nombre a esta obra de arte.
Fuente de Mercurio
El estanque de Mercurio, es probable que se construyera en el periodo árabe, como elemento de almacenamiento y regulación para el suministro de agua de toda la alcazaba.
En el centro de este estanque, hay una estatua de bronce de 1576 del dios griego Mercurio, diseñada por Diego de Pesquera y fundida por Bartolomé Morel.
De los mismos autores, son la baranda que rodea el estanque, las figuras de leones sosteniendo escudos que hay en sus ángulos
y dieciocho bolas con remates piramidales que rodean el estanque.
Detalle de la decoración de azulejos, del Cenador de la Alcoba, en El pabellón de Carlos V.
Fue construido entre 1543 y 1546 por Juan Fernández. Es de estilo mudéjar y tiene planta cuadrada. En el interior, hay una bóveda semiesférica.
Flores mimosas
Azulejo con la imagen de San Fiacre, patrón de los jardineros
y
diversas especies de flores cultivadas en el Alcázar.
Enlace a las entradas dedicadas al Real Alcázar de Sevilla
Muy interesante entrada, como las anteriores, y bonitos marcapáginas. Sólo tengo y conocía uno.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias, Enri. Afortunadamente, tanto el monumento, como los marcapáginas que de él han editado, dan para hacer entradas, en las que se muestre el encanto que tiene este Real Alcázar.
EliminarUn abrazo.
Lucía.
Te vamos a nombrar Doctora honoris causa por la Universidad de los Marcapagineros...¡Qué entrada tan bonita y completa!
ResponderEliminarEn esta ocasión también me gustan más tus imágenes que las de los marcapáginas (aunque son bonitos, ¡claro!)
Un abrazo
¡Madre mía!. Cuánto honor inmerecido. Este monumento, es tan precioso, que con sólo poner el objetivo de la cámara en cualquiera de sus rincones, ya, luce la foto. No te puedes imaginar, lo que he disfrutado preparando la entrada.
EliminarMuchas gracias, Justa.
Un abrazo.
Lucía.
Un lugar que visité hace un par de años y me asombró gratamente, por todo. Estos árabes, a la hora de edificar palacios tenían un gusto exquisito. Los mps, lógicamente, preciosos, como no podía ser de otra manera, dado lo que representan. Me ha hecho gracia lo de las flor de mimosa en un mps, porque hace años yo hice uno y la verdad es que quedan muy bien,prensando la flor.
ResponderEliminarUn abrazo
Me alegro mucho que te causara esa impresión. Les salió una obra de arte. Hoy día es admirable, las construcciones que siguen realizando. El trabajo de prensar las flores, es muy delicado, así que te quedaría precioso.
EliminarUn abrazo.
Lucía.